La organización ecosocialista
asegura que la descoordinación jurídica y el descontrol son la tónica general
en la corporación y en la empresa municipal
Sí se puede pide explicaciones al
grupo de gobierno del Ayuntamiento de Candelaria por la situación planteada en
la convocatoria de 7 bolsas de empleo para la empresa pública municipal
Epelcan, que ha sido cuestionada jurídicamente por el secretario municipal. La
organización ecosocialista destaca que el informe jurídico emitido por este
funcionario advierte del incumplimiento con las titulaciones exigidas, la
composición del tribunal y la modalidad de selección realizada exclusivamente
por concurso, que debería ser complementado, en su opinión, por una fase de
oposición; y que el mantenimiento de estas condiciones de la convocatoria puede
derivar en responsabilidades para los gestores municipales.
La organización ecosocialista
asegura que la descoordinación jurídica y el descontrol son la tónica general
en la corporación y en la empresa municipal. “El Ayuntamiento de Candelaria no
ha abierto convocatorias de empleo en muchos años y cuando lo hace incurre en
una chapuza jurídica que perjudica a unas 1000 personas que han depositado sus
esperanzas y sus expectativas de empleo en esta oportunidad y que pueden verlas
frustradas si acaba anulándose”, destaca la portavoz del grupo municipal de Sí
se puede en la corporación, Mayca Coello.
La concejala ecosocialista
asegura que “es inaudito que en una convocatoria se excluya a alrededor del 80%
de las solicitudes presentadas”, ya que es más que probable que la contradicción
existente en algunos requisitos de presentación establecidos en las bases
publicadas y los formularios de solicitud hayan llevado a que unas 800 personas
de un total de 1000 hayan cometido errores o insuficiencias que las puedan
dejar fuera del proceso de selección.
Las pruebas selectivas están
dirigidas a cubrir plazas de personal laboral temporal en reserva, por parte de
Epelcan, para auxiliares administrativos, de ayuda a domicilio, limpieza,
educadores, socorristas y monitores tanto deportivos como socioculturales.
“Esta nueva chapuza de Epelcan
demuestra, una vez más, la descoordinación jurídica existente dentro del
Ayuntamiento de Candelaria, la falta de debate interno y coordinación para la
toma de decisiones, la incompetencia del Gerente de Epelcan, que llega a firmar
documentos que no le corresponden, y la desidia política de la alcaldesa y del
concejal de Hacienda –como presidenta y responsable político de la empresa
pública, respectivamente– respecto a los procedimientos llevados a cabo por la
entidad”, asegura la concejala.
Por este motivo, Coello se
pregunta si, en esta ocasión, “tampoco se asumirán responsabilidades en un
ayuntamiento que se esmera en arreglar jardines, asfaltar calles y organizar
fiestas de Fin de Año, pero, jurídicamente, no da una a derechas en aspectos
importantísimos de la gestión municipal”, enfatiza la portavoz.
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