Sí se puede denuncia que las bases del 17 Festival de la Canción Villa de Candelaria incumplen Ley de la Propiedad Intelectual

La organización ecosocialista señala que tampoco se cumplen las obligaciones con la Seguridad Social en unas condiciones draconianas para autores e intérpretes

  

El evento no está previsto en los presupuestos municipales de 2016 y la convocatoria se hace improvisada y a toda prisa, con una acumulación absoluta de despropósitos

Sí se puede denuncia que las bases del 17 Festival de la Canción Villa de Candelaria incumplen la Ley de Propiedad Intelectual y se saltan los compromisos obligatorios de cotización a la Seguridad Social de los artistas e intérpretes que participan en espectáculos públicos. La organización ecosocialista ha registrado este lunes una pregunta dirigida al grupo de gobierno municipal del municipio sureño en la que le pide explicaciones sobre la forma en que se redactaron esas bases y las intenciones reales que alientan la convocatoria del festival en las condiciones establecidas en dicho documento.

Sí se puede ha estado en contacto en los últimos días con distintos artistas, como el cantautor tinerfeño Alberto Cañete, que conoce muy bien por su experiencia profesional las condiciones en las que se ejecutan los espectáculos musicales; además, conoce el festival por haber participado como jurado en varias de sus ediciones.

Tanto Cañete como los otros músicos consultados han llamado a Sí se puede la atención sobre el hecho de que la Ley de Propiedad Intelectual establece que esta es indelegable e irrenunciable. Por este motivo, es lógico considerar que la cláusula de las bases que establece que los tres primeros clasificados se comprometerán a realizar gratis las actuaciones que la organización estime oportunas durante un año, cediéndole su propiedad intelectual, violenta lo estipulado por esta ley, además de contribuir a una serie de contrataciones irregulares, en condiciones de semiesclavitud para los intérpretes, sin tener en cuenta las normativas laborales. 

Por otro lado, esta misma condición viola los requisitos establecidos por la Seguridad Social para la obligatoria cotización de las personas que participan en espectáculos. A ello habría que añadir la falta de respeto hacia los autores e intérpretes al reducir la cantidad asignada para los premios en relación a las cantidades de otras ediciones.

Así, la cantidad asignada para los premios queda en 1500 euros para el primer premio, 1000 para el segundo y 500 para el tercero, a repartir entre el autor y el intérprete, cantidades en bruto sujetas a la reducción por el pago de los impuestos y retenciones legales. Además, en caso de negarse a actuar a lo largo del año en lo que estime conveniente el ayuntamiento, las personas premiadas tendrán que devolver el 25% del premio recibido. A ello hay que sumar que los gastos de traslados, alojamientos y dietas correrían por cuenta de los participantes, con lo que se discrimina a los autores de fuera de la isla para su participación en el Festival de Candelaria. Como anécdota, Sí se puede llama la atención sobre que, en su afán de regular, las bases incluso establecen una revisión previa del vestuario que llevarían los participantes con el fin de colaborar en el estilismo del evento.

Aparte de las críticas que señalan los músicos consultados –y que se extienden a managers, músicos, autores e intérpretes de fuera de las Islas–, Sí se puede destaca que el presupuesto municipal para 2016 presentado en junio de este año no contempla ninguna partida dedicada al festival, “lo que nos hace sospechar que el evento se está improvisando a toda prisa, no sabemos atendiendo a qué intereses”, asegura la concejala ecosocialista en el Ayuntamiento de Candelaria Cristo Hernández.

Hernández detalla que las bases fueron publicadas el pasado 11 de julio con la intención de celebrar el festival el 30 de este mes; el documento contempla un plazo de siete días para la inscripción y no se da tiempo a la publicidad y difusión de la convocatoria. En el breve plazo para las inscripciones los autores deben entregar un archivo de audio con la canción presentada, un breve currículo del autor, la letra de la canción, fotografías artísticas del intérprete con calidad para presentar en medios y un video del mismo en el que se presente, hable de su canción y de su trayectoria. 

Por otra parte, la concejala ecosocialista destaca que a juicio de Sí se puede, “el Festival de la Canción de Candelaria poco o nada aporta a las actuaciones deseables dentro de un programa para una política cultural inspirada por los objetivos básicos de profundizar en la capacidad de juicio crítico de la ciudadanía, así como de participar, compartir y disfrutar el hecho artístico”, asegura la concejala ecosocialista.